Último adiós a José Castaño, cultor de costumbres y tradiciones criollas, y apasionado trabajador eléctrico que vivió distintas de etapas del crecimiento y transformación del servicio en la ciudad de Pehuajó.
Este 12 de diciembre se apagó la vida terrenal
del convecino José Castaño, a los 88 años.
Además de trabajar en varias instituciones
y ejercer la presidencia del Centro de la Tradición,
desde la juventud fue electricista, testigo del
origen y crecimiento energético de la ciudad.
Trabajó en la vieja usina y en la Cooperativa
Eléctrica, donde se jubiló como como Jefe de
Distribución. Integró además la seccional
local del Sindicato de Luz y Fuerza.
Trabajó en horarios nocturnos en la
instalación eléctrica del Cine Zurro.
Asistió el mantenimiento de alumbrado público
en bicicleta y con escalera al hombro,
cuando los recursos técnicos eran limitados.
Ingresó a la Cooperativa Eléctrica cuando
había solo 400 usuarios, tiempos en que
las líneas llegaban hasta la zona de la Comisaría,
en cuyos aledaños había dos panaderías
y en un baldío de enfrente paraban las calesitas.
Trabajó en el cambio de medidores
cuando llegó la corriente alterna y expiró la continua.
Se cargaban los medidores en una chata
tirada por caballo y acudian a colocarlos.
Cuando no había línea eléctrica en el Hospital,
junto a otros compañeros de trabajo
aseguraban el funcionamiento de un grupo
electrógeno, a toda hora, y especialmente
cuando hubo fuertes brotes de poliomielitis.
Trabajó en el desmantelamiento de líneas
al llegar la empresa telefónica del Estado
y fue necesario ir casa por casa.
Vivió múltiples experiencias en prestaciones
del oficio que amó entrañablemente.
José, que la Luz del buen Dios
te ilumine y te proteja. Descansa en paz.
Relatos lugareños / F. Peyrelongue / 12 diciembre 2024