
Existen jugadores que dejan huellas. Marcan una época y quedan para siempre instalados en el corazón de los hinchas. Héctor Alanís, el “Negro”, es uno de ellos. Volvió a Defe, fue capitán y pilar fundamental del mediocampo supercampeón de la década del 70. Un ídolo del club.
Recordado y admirado por los simpa tizantes azulgranas, Alanís debutó en la primera división en el 66 y se retiró de la actividad en 1984, tras vestir diversas casacas de la región. Después de iniciar su trayectoria en Defe, lució la camiseta de Unión de Curarú durante la temporada 1967 y al próximo año, volvió al club que lo vio debutar en la máxima categoría de la LPF.
En su segundo paso por el azulgrana, Héctor Alanís fue subcampeón en 1969 y formó parte de uno de los logros históricos del deporte pehuajense. Defendiendo los colores del club más ganador de Pehuajó, obtuvo los campeonatos de 1973, 1974 y 1975.

CONTRA PEHUAJÓ, NO
Luego de la obtención del tricampeonato con Defensores del Este, Alanís jugó en Atlético Mones Cazón (1976), San Martín (1977/78) y en Ingeniero Thomp son de la Liga de Tres Lomas durante la temporada 1979.
Fue a finales de la década del setenta cuando El Negro fue convocado para formar parte de la selección de la liga treslomense. El pehuajense participó del certamen argentino donde tuvo que transitar una inesperada experiencia: enfrentar al seleccionado de Pehuajó.
El choque se dio en uno de los primeros cotejos del torneo. En la cita se vieron las caras Tres Lomas y Pehuajó. Pero no fue un encuentro más. Fue el partido donde Alanís dijo “no”. El futbolista pehuajense pidió no enfrentar a su exselección. Una decisión tomada con el corazón. En esa oportunidad, Pehuajó resultó eliminado por los compañeros de nuestro coterráneo.
La actitud de Alanís pone de manifiesto su personalidad, su respeto y su amor por el terruño. Así es el querido “Negro Alanís” y así sigue por la vida, aferrado a sus costumbres y convicciones.
Nuestro modesto homenaje, cuando el club de sus amores, celebra un nuevo año de vida.