El avance de las modernas tecnologías por momentos provoca temor en cuanto a la vigencia de la palabra escrita en papel. Sin embargo, pese a esa tendencia globalizadora, los amantes de los libros (aún aquellos que han incursionado en Internet) subsisten y son consecuentes a la irreemplazable importancia del libro.Y las librerías, obviando las dificultades económicas, cumplen su cometido. Un ejemplo de ello, Librería “Los Patitos” que ha transitado más de un cuarto de siglo en nuestra ciudad.
“Hace 27 años, el 27 de diciembre de 1985 se abrieron las puertas de la librería “Los tres patitos”, nombre pensado como un cuento clásico pero se debe a nuestros tres hijos: Federico, Micaela y Sebastián”, revelan sus propietarios.
“Comenzamos con ellos muy chiquitos. En el negocio teníamos juguetes, artículos escolares, libros, etc.,y con el tiempo fuimos anexando o sacando distintos rubros de acuerdo a las necesidades y gustos”.
Es evidente que los clientes fueron marcando la tendencia. “Nos fuimos inclinando hacia el libro porque nos interesaba y gustaba más esta actividad. Encontramos muy buenos lectores que demandan continuamente un mejor material”, acotan.
A propósito del momento actual, Adolfo y Ana, sostienen que “tener una librería puede parecer un “negocio de locos”, en estos tiempos de crisis ya que se va generalizando el uso de Internet, y si a esto le agregamos las fotocopias. Sin embargo debemos agradecer que sigan existiendo personas que amen los libros y luchen con fuerza por perdurar el uso de estos”.
Coinciden en remarcar “la actividad es muy gratificante para nosotros porque trabajamos mucho con los chicos”.
Desde esta columna ratificamos la apuesta al libro y la lectura, al tiempo que nos proponemos difundir sugerencias orientativas en sección específica. Como decía Jorge Luis Borges: “Hay quienes no pueden imaginar un mundo sin pájaros; hay quienes no pueden imaginar un mundo sin agua; en lo que a mi se refiere, soy incapaz de imaginar un mundo sin libros”.
